sábado, 29 de diciembre de 2012

"Todos los besos del mundo" entre los libros destacados del año según la librería Tipos Infames

La librería Tipos infames de Madrid ha seleccionado Todos los besos del mundo de Félix Romeo (Xordica) entre los "50 infames del año". Pincha aquí para ver la lista completa.

"Todos los besos del mundo" entre los libros destacados del año según Artes y Letras


Todos los besos del mundo, de Félix Romeo (Xordica), aparece entre los destacados del año en las letras aragonesas según el suplemento de Heraldo de Aragón "Artes y Letras" del jueves 27 de diciembre de 2012. Antón Castro es quien coordina el suplemento y quien escribe este artículo, del que extractamos el fragmento dedicado a Todos los besos del mundo:

"Félix Romeo era una factoría de conocimiento, de entusiasmo y de sentido crítico. Para él la buena literatura era sinónimo de vida. [...] En los cuentos de Todos los besos del mundo está el universo de Félix: las relaciones de pareja, el humor y el amor, los viajes, la pura fabulación, las pistolas, los paisajes y están, como encapsuladas, las claves de su propia existencia."

domingo, 2 de diciembre de 2012

"Todos los besos del mundo" en la feria del libro de Monzón



El libro Todos los besos del mundo, de Félix Romeo (Xordica), se presenta en la Feria del Libro de Monzón el sábado 8 de diciembre, a las 19:30 h. Para ello se contará con la presencia de sus editores literarios Eva Puyó y Chusé Raúl Usón. A las 20 h. se hará entrega de los premios FLA, uno de los cuales recae en el escritor Félix Romeo a título póstumo. Para más información, pincha aquí.

Fotografía presentación en Barcelona


Fotografía de grupo tras la presentación de Todos los besos del mundo de Félix Romeo (Xordica) el 27 de noviembre de 2012 en Barcelona. En ella vemos al editor del libro, Chusé Raúl Usón, a los presentadores del acto, Ignacio Martínez de Pisón, Malcolm Otero Barral y Jordi Soler, y a varios amigos del escritor: las escritoras Llucia Ramis y Paula Cifuentes, su agente literaria Mónica Martín, el escritor Pedro Zarraluki, el editor Miguel Aguilar y la agente María Lynch.

Crítica en ABCD



J. M. Pozuelo Yvancos reseña el libro Todos los besos del mundo de Félix Romeo para ABCD (1 de diciembre de 2012):


Romeo a golpes ****

Reúne este libro los más logrados cuentos de Félix Romeo a juicio de los editores, que han hecho una labor de búsqueda y recuperación de una obra que había visto la luz de manera muy dispersa en distintos periódicos (entre ellos ABC) y revistas. Si compilar cuentos en un volumen siempre es necesario para rescatarlos de su pérdida, lo es más en el caso de los de Félix Romeo, porque concurren dos rasgos que los condenaban a pasar desapercibidos: su autor era poco propenso a valorar en su justa medida lo que él hacía y, por otra parte, era tal su generosidad que no había empresa editorial pequeña o revista local que no conociera su entusiasta apoyo. Eso generaba dispersión de una obra poco extensa, mucho más deslavazada y sin duda bastante más interesante de lo que parecía, una vez la vemos reunida y podemos leerla con coherencia. 

La prematura desgracia de su muerte y su talante generoso y afectuoso entrañan, sin embargo, un peligro que conviene conjurar: el énfasis en su simpatía personal y en lo buena persona que era puede contribuir, sin quererlo, a mitigar su valor literario.

Foto movida 

Una vez he leído el conjunto de cuentos incluidos en Todos los besos del mundo, veo que su reseña, pero también un estudio introductorio de su sentido, deberían ir más allá de decir que Romeo era hombre cariñoso o generoso, o del dolor que su muerte nos causó.
Lo que merece que se diga es que era un cuentista singular, por momentos muy bueno, que logra algún cuento que conviene calificar de excelente, dentro de un conjunto también irregular, donde no faltan algunos de mera circunstancia.

Podría decirse que en Félix Romeo había un funcionamiento literario a golpes, pero algunos de los que daba merecen sobresalir. ¿En qué me parece que Félix Romeo sobresale como cuentista?: en la irónica construcción de unos personajes que se definen como outsiders y están siempre pillados a contrapelo, como si su inserción social o afectiva les hubiese cogido atravesados por la fatalidad o la fotografía de sus afectos y acciones hubiese salido movida.

Formas de fracaso

Llamo la atención sobre el hecho de que los personajes de sus cuentos profesan diferentes formas del fracaso. A pocos cuentistas se les habría ocurrido tratar la vida de alguien que se gana la vida fingiendo palos como tigre de lucha libre u otro que es un simple camello que transporta droga por encargo y, desde un hotel de Lisboa, contempla su plaza de toros, parecida a Disneyworld (ciertamente es así); o bien otro que tiene a su padre en prisión, acude al casino y apuesta para poder pagar la fianza, solo unos meses antes de que lo enchironen definitivamente. Incluso cuando se trata de festejar la Semana Santa de Calanda, vemos el aburrimiento de la pandilla y un irónico reconocimiento de cansancio juvenil en interminables y tediosas horas de farra. Junto a esa posición de aledaño social, neopicaresco, hay una consideración afectiva igualmente provisional, desajustada, de todos sus personajes.

Dos rasgos me han parecido asimismo destacables: la piedad, visible en ponerse un personaje a pensar en la viudedad de los zancudos cazados en las marisma, y una cierta ironía muy aragonesa, de identidad semitorcida, se hable del Ebro, de los Monegros o de esos espacios que han sido vistos como versiones de la Ínsula Barataria.

Félix Romeo crea cuentos sanchopancescos en cuyo lenguaje convive el sabor de lo que la gente habla en atmósferas de cultura medio-baja, por la que pasan de vez en cuando héroes cultos a mojarse un poco.